Tex Tex es quizá uno de los grupos mexicanos catalogados más erróneamente, porque se empeñan en colgarles la etiqueta de “urbanos”, aunque los nativos de Texcoco (de allí el nombre Tex-Tex) interpretan un rock con punch, producto de su sólido acoplamiento como power trío. El sonido Tex encuentra su detonante final en las sólidas letras matizadas con ironía y humor. Si Lalo, Paco y Chucho Tex fueran descubiertos por la “hipster inteligentsia”, serían probablemente elevados a un estátus de culto, su sonido y look se compararía con sus coterráneos de Café Tacuba y ¿por qué no? hasta se les propondría un tour con The Reverend Horton Heat. Con motivo de su presentación en el “Chido Fest” de Alex Lora, Lalo Tex se enlazó vía telefónica sobre la trayectoria del ahora cuarteto y sus buenas nuevas discográficas.
Tex-Tex y Sus Atuendos
Lalo Tex – Mis hermanos y yo comenzamos la banda allá en 1986, con toda la intención de hacer rock en español y de convertirnos en ídolos…aztecas (risas). Al principio, tocábamos canciones de nuestros grupos preferidos, que en su mayoría eran en inglés o “gringos”. En ese tiempo no sólo era tocar rock, sino vestirte como rockero. Eso significaba andar con ropa de cuero y pelo largo.
Seguíamos el modelo gabacho, yo me pinté el pelo de rubio, me lo enchiné, pero en vez de parecernos a ellos, éramos una caricatura. Sin embargo, musicalmente no estábamos tan mal, sólo que como gabachos nadie nos ponía atención.
En esas estábamos, queriéndonos abrir paso en el rock mexicano, cuando conocimos a Fernando Arau, sí el mismo que ahora conduce Despierta América. En aquel tiempo, él era el programador del Rockotitlán que habían fundado él, su hermano y otras personas.
El fue quien nos propuso ponernos sombreros. “Son de Texcoco, que suena como Texas, entonces les iría bien una texana”. Al principio, no queríamos. Se nos hacía rara la idea, pero nos programó en el Rockotitlán, él puso los sombreros y desde que salimos esa vez fue una gritadera que no nos la acabábamos. “¡Qué onda, láncense con una redoba”, o nos pedían “La puerta negra”. Pero, ya nos comenzaron a escuchar y allí supimos que le habíamos dado al clavo.
Ahora, los sombreros se han hecho parte del Tex-Tex. De hecho, la gente lo reclama cuando no me lo pongo. El otro día, se me ocurrió salir en un programa de televisión sin él y en la calle no me lo acababa, me decían que ¡no podía hacerlo!. Es muy bonito, porque de cierta manera es querer lo nuestro, lo mexicano. Con sus virtudes y defectos.
Con Disquero o Sin Disquera
Tex-Tex comenzó a grabar con una disquera chiquita, Discos Gas GAS, con la que hicimos nuestros primeros tres discos, de 1989 a 1993, cuando firmamos un contrato con BMG.
En ese tiempo, había un boom del rock en español, otro más y todos los grupos estábamos en BMG. Con BMG hicimos tres discos y tuvimos una relación laboral buena, hicimos “Te vas a acordar de mi”, el disco cuando tuvimos la oportunidad de que nos enviaran a Londres a mezclarlo. Luego, “Súbete al tren” (en el 96) que no sé a donde nos enviaron. Pero, para el tercero la cosa iba tan bien que ya nos mandaron…a la goma.
En sí, no fue un truene en malos términos, sino que las personas que nos habían contratado ya no estaban en BMG. Algo que pasa muy comúnmente en esas compañías. Llegó el momento cuando Tex-Tex ya no cabía dentro de sus planes y nos dejaron ir.
Volvimos a ser independientes y el siguiente disco que lanzamos que fue “Acción y reacción” lo editamos en nuestra propia compañía, Arte, Música y Video. Fue un trabajo chido, pero ¡enorme!. Teníamos la ventaja de controlar las ventas de nuestros discos, de venderlos en las tocadas. Pero, también era muy absorbente, nos tocaba hacerla de empresarios, negocios y eso nos quitaba de rockanrolear.
Estamos muy orgullosos porque vendimos muy bien de ese disco, que también por acá se dio a conocer aunque ni lo vinimos a promocionar. Ahora, estamos en un arreglo con una compañía que se dedica a la música grupera para que ellos hagan la distribución del CD y así nosotros podamos seguir siendo rockanroleros.
Nuevo Disco
Estamos por sacar un nuevo disco, cuyo título todavía no podemos decir cuál es, porque es secreto (risas). Bueno, de hecho estamos en los toques finales de esta producción, en la cual hay diez temas (entre ellos un cover de Nacha Pop, el grupo español de los ochentas, el cual canta Paco). En este disco también hay una rola llamada “Salma”, que no necesito ni decir para quién es, ¿verdad?.
Es una rola muy cachonda, que el día cuando Salmita la escuche va a decir “¡Ay, güey!, este muñeco andaba bien inspirado”. La canción surgió después de leer al Marqués de Sade y la película “Del crepúsculo al amanecer” (From dusk ‘tildawn), cuando Salma sale bailando con la boa. Me impactó tanto para escribir la canción.
El Título de "Urbanos"
Ya a estas alturas del partido, está de más quejarse de la etiqueta. Como que somos un grupo difícil de catalogar… nos vemos con botas y sombreros, pero tocamos rock, que algunos todavía piensan que sólo lo deben tocar los “güeros”.
Si nos califican de urbanos o de metaleros, eso no nos importa, ya que bien nos presentamos en algún hoyo por allí que en un antro “nice”. Así que la denominación no nos importa, pero sí hay veces que cuando se habla de “rock urbano” se quiere decir “rock mal tocado”, lo cual no nos identifica.
El Toque Mágico
Nuestras canciones son muy mexicanas, porque nosotros los mexicanos nos reímos de nuestras desgracias, somos maestros de lo irónico. Para componer todo es ironía, no nos cabe el hacer canciones bien cuadradas, ya que de todo y de algo se puede reír y es que eso es lo que hacemos nosotros. Hacemos rocanrol puro, chido y divertido. Así, cuando estamos en el camerino con las groupies (que sí tenemos ¿ok?) las podemos entretener, que es lo que nos gusta a nosotros.