El Otro Yo: Cuatro Obreros, En Su Colmena

By Jesus -El Pelos- OlveraDecember 7, 2009AB's Top Music News

Por la ruta independiente, El Otro Yo se ha convertido en una de las bandas argentinas más prolíficas, con un sonido que ha madurado desde el áspero punk hasta el noise-pop más melodioso.

Este sonido llegó a Estados Unidos en la forma de “Abrecaminos”, disco que tuvo la fortuna de ser editado en estas tierras por Surco, subsello de Universal Latin Music. Gracias a ello la última vez que El Otro Yo vino de gira a California (en Septiembre del 2001) pudo compartir el escenario con La Ley y las bandas del último Watcha Tour. Desde entonces no les hemos vuelto a ver. Así que es un alivio saber que los hermanos Aldana y compañía se encuentran haciendo discos como “Colmena”, que a pesar de no haber sido editado oficialmente en Estados Unidos, se ha comenzado a importar gracias a la grata impresión que dejó en la gente que los pudo ver en el escenario. A continuación, presentamos una entrevista con El Otro Yo, así como sus impresiones acerca de la miel vertida en su nuevo disco.

El Público Angelino

Sentimos que nos han recibido muy bien, entramos más en confianza y entendimos de qué se trata todo esto, que no es muy diferente a lo que está pasando en Buenos Aires, y lo que nos pasó en Buenos Aires cuando empezamos a tocar. De hecho, acá como que apenas nos estamos dando a conocer y la oportunidad de tocar con La Ley fue muy importante, porque fue en un lugar muy importante (el Teatro Griego), muy lindo, con un muy buen sonido; y la verdad es que estamos agradecidos con La Ley, ya que las cosas nos salieron bien. Tocamos en el festival “Watcha Tour” que también fue una oportunidad importante para que nos viera la gente, para mostrar la música que hacemos y cómo es el grupo.

Identidad Otroyoiana

Cristian: Desde que empezamos, siem-pre tratamos de buscar nuestra identidad. A medida que pasaron los años siempre nos enmarcaron dentro de algo. En un momento se nos denominó rock argentino, o sónicos, o grunge, o punks, alternativos. A esta altura, y ya después de tantos discos, sentimos que El Otro Yo es El Otro Yo, o sea, hemos logrado nuestra personalidad dentro de la música, más allá de todas las influencias musicales que tenemos, que son muy variadas, porque cada uno tiene sus distintas influencias y a su vez también compartimos muchas. Eso hace que el grupo tenga una personalidad propia a la hora de editar canciones y de estar arriba del escenario.

Libando Canciones

María Fernanda: Nosotros componemos así, la mayoría de los temas los compone Cristian, los que canto yo los compongo yo, y siempre los terminamos de arreglar en la sala de ensayo, entre todos. Cada uno le pone sus ingredientes al tema, le agregamos partes, le cambiamos partes, y algo le hacemos, al final o al principio.

El Enjambre en Vivo

Raimundo: La lista de las canciones la vamos armando entre todos y siempre tratamos de planearnos cada show como un show distinto. Tratamos de adecuarnos a este momento que vive el grupo, lo que más conoce la gente y lo que ha tenido más difusión. Nos damos la satisfacción de tocar canciones que no están editadas, pero que nos gusta mucho tocar y así se ve otro aspecto, otra cara del grupo. Como con “Los Pájaros” o “Zumbido”, que es la parte más psicodélica, o más fuerte. La banda se ve y se siente en vivo. Somos una banda netamente de energía en vivo. En la lista de canciones vamos manejando esa energía a través de las canciones, y tratamos de hacer un show que tenga un poco de cada condimento del grupo.

Cristian: Dentro de los sets que armamos en vivo seguimos experimentando para ver cómo reacciona la gente, y un poco también porque nosotros nos divertimos mucho tocando. Es lo que a nosotros nos gusta. También depende del ánimo de nosotros para decir, “hey, hoy hagamos esto”, o “hoy quiero entrar bailando”.

Tratamos de refl ejar un poco nuestro día con respecto al show, y está bueno eso porque tiene que ver con la descarga en el escenario, con la energía que nosotros tiramos y que después también vuelve de abajo.

En Argentina, como tenemos más años tocando y hemos hecho más giras, generalmente la lista de temas la van armando los “amigos seguidores” antes del show. Veníamos a hacer una larga gira por el interior y en cada lugar que íbamos, a los primeros que llegaban a la prueba de sonido, le encargábamos la tarea de hacer las listas. 

Por ahí, en un par de años vamos a poder hacer aquí esa costumbre del grupo que está buenísima. Digamos que por ahora estamos proponiendo las canciones, ya cuandolas conozcan más y sepan la forma que tenemos de trabajar y de encarar un show, vamos a hacer que el público haga la lista, porque depende mucho del momento y de las ganas de la gente y las canciones que viene a escuchar.

Por ejemplo, hicimos una presentación en Argentina en un lugar que se llama Obras Sanitarias. Hicimos una votación de los temas de todos los discos de El Otro Yo a través de nuestra página web (www.elotroyo.com) y estuvo buenísimo porque la lista realmente fue armada por la gente que le gusta El Otro Yo así en votación.

Obreros en Uniforme

Lo comenzamos a usar a partir del año 1999, a partir de que editamos Abrecaminos. La idea del nombre del disco tenía que ver un poco con abrir caminos, con el momento que estaba viviendo el grupo. Y el nombre del disco era la mejor idea que podíamos haber tenido, porque realmente nos abrió un montón de caminos y por eso llegamos a tocar a los Estados Unidos.

La imagen del grupo la relacionamos con los obreros allá en Argentina, y los primeros overolles que usábamos para tocar eran los de obrero de la calle y terminaron perfeccionándose a través de unos amigos diseñadores que nos empezaron a perfeccionar los mamelucos, hasta llegar a ese lugar que tiene que ver con una estética artística. Nos moríamos de calor con los primeros mamelucos y después de cinco temas terminábamos incendiados porque son muy gruesos.

La idea también tiene que ver con la forma nuestra de trabajar, que siempre fue autogestionada, independiente y entonces por ahí el embrión de la banda viene del punk y la ideología de hacerlo uno mismo. A través de amigos nuestros que hacían ropa fuimos arreglando los mamelucos de acuerdo a nuestras necesidades, porque como nosotros no estamos construyendo sino tocando, necesitamos algo que sea más liviano para tocar y por eso terminaron siendo como son hoy. Pero, si bien hoy son un poco más vistosos, en el momento en que nos los pusimos por primera vez era como para anular esa parte hiperestética o superproducida de las bandas hoy en día con respecto a la imagen.

La Abeja Reina

María Fernanda: No sé si siento que haya una responsabilidad por ser la única mujer en la banda. A mí me encanta que haya muchas chicas en los recitales, hay muchos grupos que me gustan, sobre todo hablando de Argentina, pero que cuando los vas a ver no ves muchas chicas entre el público. A mí me gusta cuando los recitales están llenos de chicas y me encanta eso, porque siento que la música es universal y no tiene por qué ser algo sólo de varones. Pero, en general siempre lo viví así, compartido.

Yo me siento tan a gusto con mi grupo, que no me veo liderando a otro. Aparte, me di el lujo de poder hacer un disco sola y tenemos mucha libertad en nuestra banda. Pero, sí me encanta tocar con amigas. Me gusta mucho juntarme con mis amigas a tocar sin pretensión de nada y sin fines de llegar a hacer un disco ni presentarnos a tocar en vivo, sino sólo porque tengo amigas a quienes les gusta tocar; y entonces pasamos nuestro tiempo tocando.

Yo hago lo que siento, lo que me sale… me gusta así. Tengo muchísimas, muchísimas canciones, también toco el piano y tengo mucha música sin letra. Pero, llega un momento cuando necesito de ellos tres para tocar, porque me gusta más lo que nos sale a todos juntos. Me gusta la energía que ellos le ponen y la potencia también. Cuando pasa eso, yo me contagio y sale ese lado mío también.

Los 4 Fantásticos

Ezequiel: Somos 4 desde 1998, e igualmente hubo momentos de formación de El Otro Yo, como cuando Daniela (otra chica) tocaba los teclados y también hacia performances visuales, como de teatro, para algunas canciones.

Nunca fue una formación estable como cuarteto. Pero, desde la grabación de Abrecaminos estamos juntos, así que el grupo es un cuarteto en el que hay una persona que se encarga de componer los arreglos de teclados en el momento de grabar y llevar la producción de lo que es un disco en vivo, y a veces tocar las segundas guitarras que de otra manera no podríamos tocar porque somos 4 y en el disco siempre se graban más cosas. Yo me encargo de que en vivo también estén esos sonidos. 

Las canciones de Colmena se compusieron con ese formato, nativamente las canciones tienen un formato de cuarteto, en Abrecaminos entré cuando el disco ya estaba prácticamente grabado, falta grabar los teclados y los grabamos todos juntos. Después, se hizo la mezcla y por eso las canciones se compusieron de esa manera.

Hay canciones que comienzan desde la canción y otras comienzan desde arreglos que van surgiendo… de sonidos, entonces hay como un matiz más amplio al ser más personas en el grupo y hay más matices también.

Cristian: Nos sentimos cómodos como un cuarteto, sobre todo a la hora de componer.  En este nuevo disco el cuarteto se va a consolidar más, porque Ezequiel entró ya en la mezcla de Abrecaminos y este disco está compuesto ya desde 4, en la sala de ensayo somos 4 y va a tener una maduración más como de cuarteto, de ser 4 en la banda.

¿Qué sensaciones tienes del disco y qué te dejó todo su proceso?

María: Su proceso fue como la gestación de un bebé, duró nueve meses y ahora la salida se siente como un parto en cuanto a las expectativas y ansiedades que se presentan. Me deja una sensación de haber crecido en cuanto al sonido y composición de los discos anteriores.

Cristian: La sensación que tengo es que es un disco que está hecho para acompañar a la gente que lo escucha, porque en principio está hecho para que me acompañe a mí. Por otro lado, me da la sensación de que es uno de los discos más positivos de El Otro Yo, porque no sólo denota en sus letras ideas con respecto a lo difícil de la vida, sino que también da ideas con respecto a mejorar humanamente, con la premisa clara de que el cambio universal está en cada individuo, y por eso me parece que el nombre del disco representa la idea general.

¿Qué significa para ti la “Colmena Otroyoiana”?

Raimundo: Por un lado, me remite a la organización perfecta de la naturaleza, a lo importante de trabajar cada uno desde su lugar con un fin real y compartido, cada uno como una célula, un eslabón, una partícula, una idea, una palabra, que brilla y se descubre asociándose con otras manteniendo su individualidad y personalidad vivas.

Por otro lado, relaciono el nombre del disco con la reproducción en masa, desenfrenada, de todo tipo fenómenos y sucesos, de seres, objetos, sentimientos, crímenes, programas de tv, drogas, religiones, etc.

Colmena es un secreto también… ver y no ver. Más que confusión y caos, conocer y descubrir la perfección de ese equilibrio.

Ezequiel: Para mí, dentro de la colmena hay varias colmenas. Desde el núcleo básico, el grupo, compartimos cosas que están en nuestra celda, y de ahí se expande hacia las celdas vecinas. Con el disco, cuando llega a las manos de la gente, queremos que sientan nuestra misma música. Las abejas hacen la miel, y un montón de seres la disfrutan… de esa forma, en ese caso es nuestra colmena, nuestra celdita y después se expande a las personas y a los chicos que les gusta nuestra música.

www.elotroyo.com

El Otro Yo es:  Cristian Aldana: voz y guitarra • María Fernada Aldana: bajo y voz • Raimundo Fajardo: batería • Ezequiel Araujo: teclados y secuencias