Esta es la segunda producción de Juana Molina, grabada en Los Angeles en un estudio de grabación casero, donde recurrió a los teclados, la guitarra, su voz y una computadora para la creación de su disco “Segundo”.
El disco abre con una canción que es clásica dentro del folclor argentino “Martín Fierro”, una versión susurrada y de armonías dulcemente psicodélicas que nos aleja de la llanura para llevarnos a otro lado, mente adentro, sin necesidad de ayuda de químicos de ningún tipo.
El disco en sí, es un viaje intenso de una hora y diez minutos, que se disuelve en la oreja sin que uno se dé cuenta en que momento pasaron temas como “El Perro”, “El Mantra del Bicho Feo”, “Sonamos” y “The Wrong Song”, canciones que duran cada una entre 6 y 9 minutos y que conforman sólo una parte de los catorce capítulos en que se divide esta grabación, pequeños mantras que nos llevan a través de una especie de trip hop melódico, cargado de elementos acústicos que por ser -en apariencia- tan sencillos y minimalistas, lo hacen perfecto para soñar.
A pesar de la infinita melancolía de la que se impregna “Segundo”, ninguna canción resulta deprimente sino por el contrario hay momentos de luminosidad tan inocente que nos recuerda el placer de aquellas delicias cotidianas que se nos olvidan de vez en cuando (como sus nuevas versiones de ciertas canciones infantiles: “que llueva, que llueva, la virgen de la cueva…”). La manera como se tuercen las armonías de las canciones y el cambio del contexto de las letras, aunado a lo mínimo de ciertos elementos, es lo que le da a este producto su toque ácido… ácido, pero dulce. Lo encuentras en su website www.juanamolina.com y próximamente en todos lados.
Te gustará: Si te encantó Superaquello, si te gusta la psicodelia en trocitos dulces y poco ácida.