Bueno, parece que la gente no quedó muy contenta con el “vanity project” de los Douglas (Runs In The Family), por lo que la revancha de Michael Douglas tendrá que librarse en los terrenos de la comedia. Retomando la esencia de aquellos personajes que lo hicieran popular en los tiempos de “Romancing The Stone”, Douglas interpreta a Steve Tobías, un agente de la CIA a punto de convertirse en el consuegro del Dr. Jerome Peyser (Albert Brooks), un hombre que tras vivir una vida apacible y tranquila, se encuentra en medio de un embrollo que le hace entender que el futuro suegro de su hija, está a punto de echar por tierra, no sólo los planes de una boda perfecta, sino también la cómoda rutina a la que él está habituado.
Por si esto fuera poco, y contra su voluntad, el doctor Peyser también se ve arrastrado literalmente por medio mundo, mientras Don Tobías se roba un jet, hace tratos con trafi cantes de armas y trata de esquivar las balas de sus múltiples enemigos (los cuales resultan demasiado numerosos para el gusto de Peyser). Definitivamente, el que se lleva las carcajadas es Albert Brooks quien continúa demostrando su talento innato para la comedia. Aunque es bastante rescatable la actuación de Douglas, sería mejor si no nos recordara tanto al Douglas real.
