El exceso cumple 50 años

By Pablo Scarpellini. Los AngelesAugust 4, 2016Otro Rollo
By Pablo Scarpellini. Los Angeles | August 4, 2016

El Caesars Palace está de aniversario, un hotel por donde ha pasado una pléyade de nombres inolvidables

Hace 50 años, no había nada parecido. El desierto era aún más visible de lo que es hoy en ese invento llamado Las Vegas que pretendía convertirse en un parque de atracciones dedicado al desenfreno. Entonces se empezó a construir el primer casino temático del estado de Nevada, una réplica del imperio romano donde el derroche era la meta, una revolución en el mundo de los hoteles y las apuestas.

Pese al tiempo y la decadencia visible en algunas de sus vértebras, el Caesars Palace sigue siendo referencia en el Strip, un casino legendario que aún es sinónimo de opulencia y celebridad, de caras famosas que han ayudado a forjar aún más su grandeza.

Lo consiguió su fundador, Jay Sarno, con una astuta combinación de alta cocina y espectáculo de gran calado, una fórmula que aún sigue funcionando. De hecho, fue la canadiense Celine Dion la que dio un giro al concepto de residencia permanente en Las Vegas, modificando la noción que existía de la ciudad del pecado como lugar de retiro para artistas en decandencia.

Ella aterrizó en el Caesars Palace, con un teatro construido especialmente para su espectáculo, en su mejor momento profesional.
Dion sembró el terreno para Cher, Britney Spears o Jennifer López.

Claro que antes pasaron por allí leyendas aún mayores que las citadas. El primero de todos fue Frank Sinatra cuando Sarno, el gran visionario de Las Vegas, aún era el propietario. Inauguró su show en 1968 a razón de 100.000 dólares a la semana, una fortuna para la época, aunque todo terminaría tras un fuerte discusión con el manager del casino, Sanford Waterman, que acabó apuntándole con una pistola. Sinatra no actuaría en el casino hasta 1974 tras el incidente.

La lista de nombres posterior es larga: Liberace, Sammy Davis Jr., Tony Bennett, Tom Jones, Diana Ross o Elton John han pasado por un casino que para Michael Green, profesor de historia de la Universidad de las Vegas, es un “monumento al exceso”.

Dice que Las Vegas, históricamente, empujó la idea de que a lo que se venía es a una bacanal, y que el Caesars Palace era el gran estandarte de ese concepto. De ahí la atracción para tanta gente importante, desde Barack Obama hasta Joan Collins pasando por Justin Bieber, David Hasselhoff y Zach Galifianakis, el protagonista de la ya inmortal “Resacón en Las Vegas”.

Esa cinta elegió el Caesars Palace para resumir, casi mejor que nadie, de lo que puede significar Las Vegas, una juerga interminable donde cualquier cosa es posible. Hoy en día existe incluso un tour por el casino en el que se pueden descubrir los lugares donde se rodó la cinta protagonizada por Bradley Cooper.

Es la enésima referencia para un hotel que abrió sus puertas el 5 de agosto de 1966 con una fiesta de impresión. Sarno invirtió un millón de dólares con Johnny Carson y Jimmy Hoffa entre los invitados. Entonces era un hotel de lujo con 14 plantas. Hoy es una pequeña ciudad con seis torres y 4.000 habitaciones, con un centro comercial, el primero de su clase, que abarca casi 60.000 metros cuadrados. Todavía un orgulloso culto al exceso.

@pscarpe